- El patrimonio de un municipio lo constituyen no solo sus edificios históricos, sino también aquellos que guardan una estrecha relación con la historia, los movimientos sociales o las reivindicaciones populares. Bajo ese prisma, el Ayuntamiento de Bellreguard ha señalizado, con paneles explicativos, cuatro de esos elementos: la iglesia, las antiguas escuelas, la Casa del Poble y la actual Casa de Cultura-Ayuntamiento.
- El ayuntamiento difunde cuatro elementos que constituyen una parte de su historia con paneles divulgativos ilustrados.
S. S. Levante-EMV Safor-Valldigna.
Poner en valor y difundir el patrimonio histórico local, y en especial, el municipal. Ese es el objetivo que persigue la iniciativa llevada a cabo por la Concejalía de Patrimonio de Bellreguard. El departamento que gestiona el alcalde, Àlex Ruiz, ha instalado cuatro paneles informativos en algunos de los elementos patrimoniales más relevantes del pueblo.
Carteles que permiten a vecinos y visitantes conocer más a fondo la historia y particularidades de cuatro edificios históricos: la iglesia de Sant Miquel, la antigua Casa-Ayuntamiento, las viejas escuelas y la Casa de CulturaAyuntamiento nuevo.
Los paneles, con textos explicativos en valenciano, castellano y francés, incluyen un código QR que permite acceder con el teléfono móvil a información más exhaustiva del elemento patrimonial que ha sido colgada en la página patrimoni.bellreguard.net.
Según explica Àlex Ruiz, con la colocación de los paneles se persigue, en primer lugar, «hacer visible lo que nos han legado y aún mantenemos, porque lo que no se conoce no se valora y, por tanto, no se estima y respeta para futuras generaciones». Pero el alcalde añade que también se pretende mostrar «que lo que hoy conocemos no siempre ha sido así». Por ese motivo la iniciativa «tiene la finalidad de dar a conocer a los bellreguardins y bellreguardines lo que es suyo y, a la vez, que sirvan de apoyo turístico para que quien nos visite nos conozca mejor».
El primer panel se ha situado en la iglesia de Sant Miquel, que inicialmente fue una capilla y que el arzobispo Juan de Ribera, en 1574, independizó de la Colegiata de Gandia. Durante el siglo XVIII se construyó un nuevo templo de estilo barroco que fue destruido, con dinamita, durante la Guerra Civil española. Entre 1939 y 1952 se construyó la nueva iglesia de Sant Miquel con uno de los campanarios más singulares de la comarca por su tipología y ubicación.
El segundo elemento que se difunde es la popularmente conocida como Casa del Poble, que fue inaugurada el 14 de abril de 1936, coincidiendo con el quinto aniversario de la proclamación de la Segunda República Española.
El año anterior se derribó el viejo ayuntamiento y, para el nuevo se adquirió la casa del número 1 de la calle de Sant Antoni, donde se siguió un informe del arquitecto Joaquín Aracil.
Bellreguard fue uno de los primeros municipios de la Safor en disponer de escuela pública. En 1822 aparece documentada en el segundo piso del ayuntamiento y en unas casas alquiladas por el consistorio. Pero el primer edificio propio tardaría en llegar más de un siglo, dado que se construyó en 1926 con un coste de 41.448 pesetas de la época. En 1936, la nueva escuela se amplió con cuatro secciones y una biblioteca, gracias a una subvención del Estado de 60.000 pesetas.
Y el cuarto elemento patrimonial que Bellreguard reivindica es la Casa de Cultura y nuevo ayuntamiento. Su construcción fue uno de los proyectos estrella del primer consistorio democrático, y fue posible gracias a la donación de la cantidad conseguida en los Aplecs populares valencianistas celebrados al inicio de la democracia.
Bajo los lemas «Per unes festes populars» y «Anem de festa», los Aplecs fueron un éxito, con la asistencia de miles de personas disfrutando con la música de Al Tall, Lluís Miquel y 4Z, Companyia Elèctrica Dharma , Sisa, Orquesta Mondragón, Lole y Manuel, Manzanita o Gato Pérez, entre otros.
La Casa de Cultura y nuevo Ayuntamiento se inauguraron el 20 de septiembre de 1986, y desde el 25 de abril de 2018, una placa recuerda a su entrada el 40 aniversario del primer Aplec.